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XA TEMOS MEDIADORA DAS PERSOAS CON DIVERSIDADE FUNCIONAL

2/7/10
 
 
Entrevista que collemos do Diario de Ferrol e publicamos para que poidades ver os pensamentos da persoa encargada de "mediar" polos nosos dereitos



Lucía Pérez, Mediadora de las personas con diversidad funcional

Su vida cambió radicalmente en el año 2000 cuando le diagnosticaron una enfermedad que la dejaría en una silla de ruedas. Desde entonces lo ha tenido claro y, con la premisa de que “la silla está debajo del culo, no en la cabeza”, se hizo socia de la ASCM y empezó una nueva vida marcada por el trabajo, la constancia y la defensa de los intereses de las personas del colectivo al que representa.Un trabajo que no ha hecho más que empezar.

Entrevista de Montse Fernández
El pasado tres de mayo la Comisión de Accesibilidad acordó elegir a Lucía Pérez Pereira como mediadora de las personas con diversidad funcional de la ciudad, decisión que fue ratificada en el pleno de final de mes. Se trata de un órgano de participación a través del cual esta persona se convertirá en el nexo de unión entre las asociaciones y colectivos de personas con diversidad funcional de la ciudad y los poderes públicos o, lo que es lo mismo, el gobierno municipal. Así, su principal tarea será trasladar a los políticos las necesidades y dificultades con las que se encuentra el colectivo, así como analizar aquellas actuaciones que se lleven a cabo en la ciudad y que puedan resultar lesivas para sus derechos e intereses. Se trata, en definitiva, de un órgano de asesoramiento y que podrá acudir a los plenos o comisiones informativas “con voz pero sin voto”, como ella misma puntualizó.
A la espera de tomar posesión de su cargo, Lucía Pérez está feliz por su reciente elección como Mediadora y ya tiene en mente muchas cosas que se deben mejorar en la ciudad. De este asunto y otros quiso hablar con Diario de Ferrol.
—¿Para cuándo la toma de posesión del cargo?
—Aún no lo sé, supongo que de cara a la próxima semana, ya que el lunes me reuniré con María –concejala de Benestar– y ya hablaremos de eso y muchas cosas más.
—¿Que implica para usted convertirse en mediadora?
—En el plano laboral, desde luego que voy a tener muchísimo trabajo, seguro. Probablemente voy a recibir muchas críticas porque no es fácil trabajar al gusto de todos y además esto no es cosa de un sólo día. También es muy necesario el apoyo de todos los colectivos y del propio Concello, ya que yo puedo saber mucho de diversidad funcional pero sé muy poco de la sensorial, motivo por el cual necesitaría el respaldo de estas persona para aprender. De hecho una vez que se abra la oficina en la Casa Solidaria espero reunirme con todas estas personas.
—¿Que la llevó a presentarse para este puesto?
—Lo primero que me llevó a presentarme es que creo que valgo para este puesto, sino no me hubiese presentado. Además, yo tengo una visión más global del problema porque hoy soy una persona discapacitada, pero hasta el año 2000, que fue cuando me vino la enfermedad, yo era una persona normal, por eso creo que puedo ver las cosas desde los dos puntos de vista.
—¿Cuál es el principal inconveniente con el que se ha encontrado?
—Sobre todo las barreras sociales, que aún existen, porque por muchas barreras arquitectónicas que nos quiten es difícil avanzar con las sociales. Aveces los mismos discapacitados somos los que ponemos estas barreras. Siempre recuerdo al primer terapeuta que me sentó en una silla de ruedas y me dijo la silla está debajo del culo, no en la cabeza. Hoy soy yo quien da este consejo a la gente.
—¿Qué le pareció la Casa Solidaria?
—Me pareció muy bien, muy bonita, pero eché de menos algunas cosas como el sistema de voz para invidentes en los ascensores, ya que ellos deben saber en que piso están en cada momento. En los baños, por ejemplo, uno de los espejos está puesto de tal forma que una persona en silla de ruedas no se puede ver, algo que se solucionaría con un poco de inclinación. Otro de los detalles que aprecié y que seguro que aún se puede solucionar junto a los otros es el mostrador que está situado a la entrada del inmueble. Es muy alto para personas que, como yo, utilizan silla de ruedas. Bueno son detalles, las virtudes y defectos reales se ven cuando empiezas a utilizar el edificio.
—¿La figura del mediador surge del desconocimiento de los políticos?
—A ver, yo creo que el desconocimiento es relativo, ya que nuestras quejas y reivindicaciones llegan a diario a todas las Administraciones y al Concello de Ferrol en nuestro caso concreto. Yo creo que lo que hay es falta de interés. A partir de ahora como mediadora que soy les trasladaré en los plenos y comisiones todas las cosas que vayamos viendo.
—¿Como qué?
—Pues, por ejemplo, las rampas de acceso a edificios públicos. Ahora nos la pusieron en la biblioteca de Ferrol, por la parte de atrás, pero enseguida se llena de maleza y hierbas y tardan mucho en adecentarla.
—¿Cuáles son las primeras carencias que perciben en una ciudad como Ferrol ?
—Uno de los problemas importantes se produce a la hora de ir a la playa. Es una pena vivir en una ciudad como Ferrol y no poder bañarse en las playas. Los accesos son imposibles. Además, en los lugares que hay pasarela, ésta se acaba de repente dejando tirada a los usuarios en medio de la playa por donde pasa todo el mundo. De ir a bañarnos ni hablar, es imposible, ya que ninguna de las pasarelas llega al agua y siempre dependes de alguien que te ayude.
—¿Qué playas disponen de pasarela?
—Que yo sepa la de Caranza, A Graña y Doniños, pero ninguna tiene pasarela que llegue hasta el mar.
—¿Y el transporte?
—Fatal. Fíjate que ni tan siquiera ahora con el Xacobeo podemos ir a Santiago de Compostela en autobús, ya que ninguno de ellos está acondicionado. Pero no sólo para ir a Santiago, no podemos coger el famoso Noitebús que tanto anuncian y no digamos para ir a las playas, ninguno está adaptado para personas con movilidad reducida. Yo, por ejemplo, estudio en la UNED y para ir a mis clases dependo de un compañero que me lleva en su coche, ya que en transporte público es imposible para mí. Otro de los problemas que tenemos las personas con problemas de movilidad es que necesitamos de rehabilitación constante y el autobús nos deja en el Arquitecto Marcide pero no nos acerca al Novoa Santos, que es donde está el área de rehabilitación. Yo para ir a una revisión, por ejemplo, dependo de mis padres o amigos. Ésta es una de las cuestiones que tendré que hablar con María López.
Estos temas y otros problemas de la ciudad como aceras demasiado estrechas o en mal estado, falta de accesos a edificios públicos, adaptación de medios de transporte y mejoras en la accesiblidad de las playas, son sólo algunas de las reinvidicaciones de la mediadora Lucia Pérez, que irá añadiendo a su lista además de las que le hagan llegar el resto de colectivos con diversidad funcional de la ciudad.

 
 
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